va llover hoy - dijo el mameluco azul posado en la camioneta, le hechó un chupón al cigarro y continuó- las hormigas se pasean ida y vuelta, en aquellas baldosas- tiró la colilla y marchó en dirección a casco blanco. Lo miró con sus ojos claros y la nariz puntiaguda, le hizo seña para que lo ayudara con el cemento, ya no era hora del almuerzo, había que trabajar. Aquel dejó seguir las palabras de igual modo que los autos en la calle, miró hacia la botella de agua y no la agarró.
Mamelucos. Cascos blancos. Van y vienen como hormigas destruyendo.

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